PATRIMONIO
Casa Hermandad
La Casa de Hermandad de nuestra corporación, se encuentra en el Nº 32 de la C/ Parras, del sevillano Barrio de la Macarena. Cuenta con dos plantas además del bajo, donde se encuentra en la entrada a la derecha, durante todo el año expuesta Nuestra Carreta de Simpecado. En la 1º Planta, hay un salón de actos, presidido por un cuadro de la Virgen del Rocío que ya se encontraba en la antigua casa Hermandad (donado por un grupo de hermanos) , y el despacho del Hermano Mayor. En la planta superior las oficinas y despachos de Mayordomía y Secretaría . Casa adquirida en el año 1996,siendo Hermano Mayor D. Emilio Almenara Castaño. Es proyectada y ejecutada durante el mandato de la Junta de Gobierno presidida por D. Manuel Velázquez Diana. Se inaugura el 14 de Diciembre de 2008 en Función solemne oficiada por Su Eminencia Reverendísima Cardenal Arzobispo de Sevilla , Fray Carlos Amigo Vallejo, concelebrada por nuestro Director espiritual del momento, y párroco de San Gil Abad, el Rvdo. P.D. Antonio Borrego Cobos, por el Rvdo. P.D. Juan Romero Domínguez, coadjuntor de la citada parroquia, y por el Rvdo. P.D. Manuel Gordillo Cañas, rector de la Basílica de Santa María de la Esperanza, siendo Hermano Mayor D. Jesús Reina Sousa.
Carreta
Nuestra carreta es de plata de ley y obedece al diseño que realizó D. Antonio Garduño, que la concibió como –son sus palabras- un “santuario de plata”, habiendo sido ejecutada en Orfebrería Triana en distintas fases, si bien desde el primer año en que era de madera y con una sola columna de plata ya seguía el diseño inicial. Es una magnífica obra que nos ha sido solicitada para participar, entera o por partes, en numerosas exposiciones de Orfebrería y de Arte Sacro. El “cajón” es obra del desaparecido Pedro Guzmán de Bollullos de la Mitación, de grandes dimensiones, lleva ruedas 10 cm mayor de diámetro de lo habitual para aliviar el trabajo de los bueyes que tiran de ella. Según manifestaba el Sr. Garduño, a la hora de diseñarla no quería que se pareciese a ninguna otra, sino plasmar originalidad (tomó fotos de las carretas existentes entonces para que no se pareciese a ninguna) además de tener en cuenta la finalidad de la misma, que no es otra que la de albergar ese pequeño retablo que constituye el
Simpecado con la Virgen del Rocío y su Divino Hijo. Por eso hizo un diseño pensando en que fuese un templo ambulante cargado de Simbolismo Mariano, como si de un sagrario se tratase. Así el techo está concebido como una bóveda con cuatro grandes cartelas con escenas de la vida de la Virgen: La Anunciación (Ahí empezó todo), la Huida a Egipto (El primer camino), La Coronación de la Virgen (lo que es, una Reina) y la Venida del Espíritu Santo o Pentecostés (lo que celebramos en la Romería). Sí hubo inspiración en algunos elementos marianos de nuestra ciudad adaptándolos al nuevo destino, como por ejemplo el inicio de las columnas inspiradas en las jarras de flores del paso de Ntra. Sra. del Mayor Dolor y Traspaso (Gran Poder) o en las capillitas de los faldones. También la “cupulita” o “linterna” situada en el centro del techo, sobre el Simpecado, con sus ventanitas que dejan entrar la luz del sol, de clara inspiración en la que remata la Basílica del Cristo de la Expiración (Cachorro) con quien tanta vinculación emocional mantenemos. La iluminación durante la noche se realiza con los cuatro candelabros de guardabrisas de las esquinas, además de las “velas” situadas junto a la miniatura de la Esperanza Macarena de plata que preside la delantera de la carreta, obra de Orfebrería Triana y la cara y manos de la Virgen del imaginero sevillano Luis Álvarez Duarte. También hay iluminación indirecta desde la trasera de unas flores situadas en los laterales del techo. Lo que pretendía el autor es que
de noche fuese un“faro”, un ascua de luz que atraiga a todas las miradas y que se identifique sin lugar a dudas de que la que luce es la carreta de la Macarena. Como originalidad añadida están los colgantes que, a modo de doble
cortinilla, cuelgan desde el techo como unas “bambalinas”, y es que al ser una carreta muy pesada necesitaba algo de la alegría macarena en su andar, de forma que al moverse, aunque fuese en llano, se produjese ese efecto de “mecida” con sus colgaduras y campanillas. En pala
bras de Garduño, no pretendió diseñar la mejor carreta, pero sí la que manifestase mayor devoción y amor a la Virgen con la personalidad de su barrio, la Macarena.
Juego de Insignias
El Estandarte
Es la insignia oficial de la Hermandad que preside todos los actos corporativos. Es una bandera de color verde plegada y fruncida por un cordón de calabrote de oro rematado con dos borlas del mismo material. Esta insignia va colgada de un asta de madera recubierta de tubos de metal cincelado y terminación con su regatón, rematado todo ello con una cruz del mismo metal. En el centro, lleva el Escudo de la Hermandad, rodeado con una artística orla bordada en oro obra de los sucesores de Carrasquilla.
El Libro de Reglas
Es obra de orfebrería Triana, en plata de ley sobre terciopelo verde, en su anverso figura el Escudo de nuestra Hermandad, centrado en un pergamino sostenido por ángeles y bajo ellos el Arco de la Macarena.
En sus páginas centrales hay pinturas de Luis Rizo del año 2005. Nuestra Sra. del Rocío vestida de Reina y el Espíritu Santo simbolizado por una Blanca Paloma que sostiene nuestra medalla bajo el arco de la Macarena. Sobre ellas se realiza el juramento de todos los hermanos en nuestra Protestación de Fe durante la Función Principal de Instituto.
El Banderín
Está confeccionado sobre terciopelo de color verde, donde figura en su parte central el anagrama de María, bordado en oro y rodeado de una orla o cenefa también bordada en oro, obra de sucesores de Carrasquilla. En el reverso, sobre raso de color oro viejo, lleva bordada la fecha de fundación de la Hermandad. Está rematado con un cíngulo de oro y dos borlas. La posición del paño va en forma de banderín caído. Rematando su asta lleva una cruz plateada.
La Bandera
Está confeccionada en paño de seda con los colores de nuestra divisa, que son el verde y el oro viejo. Su composición es de la siguiente forma: cuatro cuarteles en forma rectangular de color oro viejo, unidos a una Cruz, que abarca todo ello, en color verde. Lleva un asta de madera y la parte vista, unos tubos de plata cincelada, rematado con el símbolo del Arco de la Macarena, también en plata de ley. Pende de este remate, un lazo con los colores de la Hermandad.
La Bandera Concepcionista
Es la alusiva al Dogma de la Inmaculada Concepción de María.
Es de paño de raso en color celeste con una cartela pintada al óleo, obra de Rosa Arestoy Tous con la imagen de la Inmaculada. El asta de plata cincelada, rematado con un anagrama de María y cíngulo de oro con dos borlas.
Juego de varas
Llevan el escudo de la medalla de la Hermandad construidas entera dorada para el Hermano Mayor y en metal plateado, con sus tubos cincelados, para los miembros de la Junta de Gobierno. Las que se disponen para el resto de hermanos llevan el mismo escudo de la medalla de la Hermandad, en metal plateado, con asta de madera barnizada terminada en regatón y cantonera del mismo metal.